Aporta a la planta minerales que mejoran la fertilidad del suelo y la retención de agua. Efectivo para combatir insectos dañinos como babosas, caracoles, pulgón, mosca blanca, orugas, gusanos, trips, cochinillas… en todo tipo de plantas y cultivos.
Aplicaciones autorizadas, dosis, modo de empleo y plazo de seguridad
Principalmente se usa como plaguicida natural y fertilizante natural.
Preventivamente: Repartiendo el producto por el suelo del cultivo -jardín o huerto- de manera preventiva. De manera, que con su aplicación se evita que los insectos y otras plagas que se acerquen, acabarán desapareciendo.
Curativamente: En aplicación foliar, se disuelve el producto en agua y se pulveriza a la planta ornamental o cultivo hortícola.
Como insecticida, acaricia y fungicida. Preventivamente para insectos: usar 3 días seguidos y repetir a los 7-10 días. Para hongos: pulverizar cada 20 días, hasta que los síntomas remitan.
Plazo de seguridad. No procede.